sábado, 31 de enero de 2009

Eco traidor


Vi las manos de esas hojas silenciosas, que me contaron secretos
sin darse cuenta. Me contaron que el sol no les dijo nada, pero sabía;
él lo sabía. Me contaron que la lluvia se lo gritó al viento y que éste
no quiso desparramarlo por el bosque. Por miedo, obvio.

Vi con las manos cerradas, todos los sonidos que escondías. Las hojas, en su silencio, también los vieron. También oyeron. Abrí las manos, para ver mejor, pero ya te habías ido, con el sol, por la sombra, efímera y vanidosa, antes de que la lluvia les mordiera los talones.

Vi con las manos vacías, que un eco sordo me comía los ojos.
Pero no dije nada, no pude decir nada. Con los párpados raídos,
tan rotos, tan mudos, no tuve valor para decir nada.


[Foto: gentileza de Nanita.]

4 comentarios:

Anónimo dijo...

y viste como quedaron las ojas...nadie dice nada, todo es en secreto y de tristeza o aburrimiento asi quedaron....
viejo algo alegre no tenes para contar????
ok ok ok no te lo tomes a mal copait...sabes que yo te quiero y que mis chistes son malisimos... =)

Anónimo dijo...

La H de las ojas la escribo en este comentario ...y que?!

Niev dijo...

mmmmm..algo alegre... ¿quién dice que esto es triste? Vos porque no llegas hasta el fondo de la cuestión... eso es...

Unknown dijo...

Mucho tengo gusto de tu foto y del poema que hiciste que fue inspirado por ella:) Gracias…