sábado, 10 de enero de 2009

Pasó el Polaco a tomar unos mates...


Estás desorientado y no sabés

qué trole hay que tomar para seguir.

Y en ese desencuentro con la fe

querés cruzar el mar y no podés.

La araña que salvaste te picó

¡qué vas a hacer!

y el hombre que ayudaste te hizo mal

¡dale que va!

Y todo el carnaval

gritando pisoteó

la mano fraternal
que Dios te dio.

Qué desencuentro

Si hasta Dios está lejano

Sangrás por dentro,

todo es cuento, todo es vil.

En un corso a contramano

un grupí trampeó a Jesús...

No te fíes ni de tu hermano,

se te cuelgan de la cruz...


Quisiste con ternura, y el amor

te devoró de atrás hasta el riñón.

Se rieron de tu abrazo y ahí nomás

te hundieron con rencor todo el arpón


Amargo desencuentro,
porque ves
que es al revés...
Creiste en la honradez
y en la moral...
¡qué estupidez!


Por eso en tu total

fracaso de vivir,

ni el tiro del final
te va a salir.


[
Música: Aníbal Troilo | Letra: Cátulo Castillo ]

1 comentario:

Anónimo dijo...

Qué linda que es la poesía tanguera. Qué bien que dicen lo que quieren decir. Con claridad, con sencillez, con esa cosa de barrio.

Y no me puedo ir sin antes decir que el indio tiene mucho de tango, eh. Ojota. Si, ojota, malla y toallón. Ah, y pantalla solar porque sufro de rosácea.

chau