lunes, 20 de abril de 2009

Raúl

Raúl se sentía solo. Me decía que se la pasaba dando vueltas, siempre sobre lo mismo. Me contaba que escuchaba la ventana, pero no podía ver el sol. Que charlaba con Héctor, pero no podía mirarlo a los ojos. "Qué triste es no poder ver por la ventana, y pensar que estoy tan solo..." me decía, con la voz pálida. Que se estaba perdiendo un mundo entero por no poder tener ojos como todos, eso lo ponía muy triste... entonces, yo, mientras él se terminaba el mate ya un poco lavado, le hice unos ojos amables para que pueda disfrutar del mundo de las imágenes... para que no esté más triste, para que pueda sonreir con los párpados... pero fue en vano; ni bien le pegué sus ojitos nuevos, estos se dejaron caer suavemente y transformaron el nuevo rostro de Raúl en un semblante más triste del que ya tenía, sólo que ahora era más expresivo. "Qué triste es mirar por la ventana, y ver que estoy tan solo", repetía bajito...

5 comentarios:

malacara dijo...

pobre raul, tenes que conseguirle una raula (o un raulo, como el quiera) que sino se va a morir de tristeza...

Niev dijo...

Es que es medio pretencioso... le estaba por presentar a una de ahí, de la cocina, copada, sencilla, de su onda... pero me sacó cagando.. "Naaa yo con esa heladera no salgo ni en pedo" me dijo...

Y bué... se quedará solo, ya se lo advertí...

malacara dijo...

vos tambien... es muy grande para el, es como que una hormiga salga con un elefante, se va a sentir mal..

Niev dijo...

Bueeeeeno es que él se hace el parco viste, nada de cosas melosas, y eso, entonces le quise buscar una mina que sea así, como él, fría, dura... pero me dijo que era demasiado ya... que prefería algo un poco más tierno. Entonces le tiré un matambre hervido en leche, y no se... un poco más contento se quedó.

Nanita dijo...

Que bueno...copo....sos como Dios....!!!!